El Cannabis: El humo destructivo

” La droga es el producto ideal… la mercancía definitiva. No hace falta literatura para vender. El cliente se arrastrará por una alcantarilla para suplicar que le vendan. El comerciante de droga no vende su producto al consumidor, vende el consumidor a su producto. No mejora ni simplifica su mercancía. Degrada y simplifica al cliente.”

William Bunoughs

¿QUÉ ES EL CANNABIS?

Parece, que mencionar la palabra cannabis, en nuestro país es de lo más normal. Es más, muchos se quejan de que no esté legalizada. Pero en realidad,  pocos conocen su lado más oscuro y destructivo. Todos los efectos secundarios que se esconden detrás de esta droga.

El cannabis, forma parte de la planta cannabis sativa. En su resina, hojas, tallos y flores se elaboran las drogas ilegales. Las más consumidas en España son el hachís y la marihuana.

La marihuana se obtiene de la trituración de de las flores, hojas y tallos secos. 

El hachís, por su parte, está elaborado con la resina que se almacena en las flores de la planta hembra.

En general, todas ellas, son substancias conocidas como psicodislépticas, es decir, que tienen la capacidad de alterar la realidad y/e  inclusive crear alucinaciones.

Aunque todas estas drogas tienen unos efectos comunes, es cierto que según los rasgos de personalidad del individuo, pueden crear unos efectos idiosincráticos diferentes.

Principalmente, el cannabis, se caracteriza por 5 grandes cambios:

1. Cambio del Estado de Ánimo: Los cambios de estado de ánimo se ven más acentuados o menos, en función del tipo de personalidad, que tenga la persona. Cuando se consume, puede llevar al consumidor, de un extremo a otro emocionalmente,  en cuestión de minutos. Puede pasar de los estallidos de risas incontrolables a la sensación de tristeza más profunda.
2. Afectación del Aparato Motor (Movimiento): El Cannabis afecta al Sistema Nervioso Simpático. Él se encarga de las partes de nuestro cuerpo  respnsables de controlar y ejercitar los movimientos e inclusive, las posturas corporales. Y otro tipo de actividades vitales para nuestro cuerpo como son: la frecuencia cardíaca, la frecuencia respiratoria, la presión arterial y el tamaño de nuestras pupilas entre otros. También puede provocar vértigos, temblores, náuseas e hiperreflexia (aumento de los reflejos). Y se encarga de que los vasos sanguíneos se estrechen y reduce los jugos digestivos.
3. Aumento de los estímulos: Aumenta la capacidad sensorial, quedando afectada la capacidad de percibir los estímulos. Ya no solamente los estímulos que nos rodean, sino también los interoceptivos ( los que sentimos dentro del propio cuerpo). Tristemente, esto es buscado por muchos de los consumidores de cannabis. Esperan encontrar en el consumo, la creatividad tan anhelada.
4. Cambio de sentido del espacio y en el tiempo: Sus efectos alucinógenos provocan, estados de confusión, desorientación y agitación.
5. Efecto de Despersonalización: Es un factor de alerta a tener presente, ya que no es propio en si del Cannabis, sino que más bien, es una señal de alarma de que se ha producido un proceso de  intoxicación. Últimamente, suele ser frecuente, ya que el cannabis, suele ir mezclado con otro tipos de substancias, para que al vendedor le salga más  barato y al mismo tiempo el consumidor se enganche más. En estos casos, más que nunca, es necesaria la ayuda de un profesional.

“Es como si se abriera una brecha entre mi mundo y el exterior, ya que lo que se percibe se aleja con esta sensación; es como si en cierto modo, dejaras de ser humano.”

Consumidor con efecto de despersonalización

Desgraciadamente acabamos de mencionar, los rasgos generales que el consumo de cannabis provoca a corto plazo.

CONSECUENCIAS DEL CONSUMO A LARGO PLAZO

A largo plazo, cuando se lleva mucho tiempo consumiendo,  no solamente se cumplen los rasgos agudos mencionados anteriormente, sino que el cuadro sintomatológico con el  que nos podemos encontrar, es mucho peor. Principalmente, hay tres vértices a tener en cuenta, que pueden llevar a la persona a su propia autodestrucción y desgraciadamente inclusive a la muerte:

• Síndrome Amotivacional:  La persona entra en un estado permanente de pasividad. En este estado, los estímulos, apenas tienen ningún tipo de influencia. Conlleva a la persona a un desinterés por todo aquello que tiene alrededor. Siente apatía, pérdida de objetivos e incluso de sus metas personales. Desgraciadamente, también afecta a la área cognitiva (sus pensamientos). Especialmente aquellos pensamientos, que tienen que ver con la capacidad de concentración, atención y memoria, llegando a provocar serios problemas en la capacidad de retener información tanto a corto como a largo plazo. La desmotivación y la falta de concentración, llevará a un fuerte absentismo escolar en los más jóvenes, afectando por tanto de manera directa en el rendimiento de sus tareas y exámenes académicos o en sus trabajos en el caso de los adultos. Pudiendo llegar a fácilmente, al despido disciplinario.
• Esquizofrenia parcial o permanente: Hay estudios suficientes que demuestran que un consumo continuado de cannabis y la probabilidad de trastornos psicóticos como la esquizofrenia existe una relación directa entre ellos. También se ha demostrado, que empeora la sintomatología de las personas que ya sufren enfermedades mentales e inclusive les puede llevar a inducirles,  ideas de autolesiones y desgraciadamente, incluso de suicidio. En la mayoría de los casos, si las personas son tratadas en un centro especializado de adicciones, la sintomatología, sobretodo en el casos en los que hay delirios psicoticos, provocada por el consumo, suele revertir en aproximadamente medio año.
• El consumo de cannabis está directamente relacionado con el consumo de otras substancias (Policonsumo): El consumo de cannabis no suele consumirse de manera aislada, sino que suele mezclarse con otras substancias que también son perjudiciales como el alcohol o otros tipos de droga. Lo cual, provoca, que la mezcla, pueda ser realmente un cuadro explosivo, por no decir, que su abuso o drogas en malas circunstancias, sea mortal.

¿QUÉ TRATAMIENTOS EXITEN PARA EL CANNABIS?

Para escoger cuál es el tratamiento óptimo y que mejor va a adaptarse a la persona que consume,  siempre debe realizarse una evaluación inicial multidisciplinar. Ésta, estará formada por la colaboración de profesionales como un psiquiatra, un psicólogo y un enfermero como mínimo. La evaluación nos permitirá detectar cuál es el grado de dependencia que tiene la persona con con la droga y si tiene alguna enfermedad comorbida, con qué recursos personales cuenta tanto de protección, como de factores de riesgo. Para poder evaluar en que grado, y con que facilidad puede dejar el consumo, con que recursos cuenta y qué probabilidades y riesgos hay de que recaiga. 

Como hemos mencionado anteriormente, aunque las personas consumidoras, pueden tener unos patrones comunes, siempre hay unos rasgos diferenciales, que deberán tenerse en cuenta, para que el tratamiento tenga la máxima adherencia y por tanto las mayores probabilidades de éxito. Por esa misma razón, hay que tener en cuenta:

La posiblidad de una patología dual asociada: Depresión, ansiedad, esquisofrenia, policonsumo, psicopatologías, etc.

Tipo de tratmiento  psicológico y psiquiátrico en función del grado de dependecia y si hay alguna otra enfermedad psiquiatrica asociada.

Recursos de apoyo, proteccion y apoyo con los que cuenta el paciente y los factores de riesgo.

Según el tipo de consumo y de los factores de riesgo y protección, se puede hablar principalmente de 2 tipos de tratamiento:

• Tratamiento ambulatorio
• Tratamiento hospitalario

¿QUÉ ES EL TRATAMIENTO AMBULATORIO? ¿PARA QUIÉN ESTÁ INDICADO?

El tratamiento ambulatorio consiste en un tratamiento de hospital o centro especializado en adicciones en tóxicos, dónde la persona,  acostumbra a ir dos veces semanales al principio y visitar a su psiquiatra y/o psicólogo asignado.  Muchas veces, durante las horas que el paciente se encuentra en el hospital de día, la persona, suele participar en grupos de terapia y de apoyo. Al mismo tiempo, se usa ese periodo para que el paciente que se encuentra en el centro, pueda realiar un análisis de orina y así,   se pueda controlar que no haya consumo, mediante una prueba de tóxicos.

Este tipo de centros están recomendados para personas que no estén consumiendo desde hace mucho tiempo. También esimportante siempre estar atentos, a que no hayan desencadenado otro tipo de adicciones o tengan comorbilidad con otras enfermedadedes. La gran voluntad y motivación de querer dejar la droga, al mismo tiempo que altos factores de proteccion y bajos factores de riesgo, serán claves para recuperar una vida saludable.

INGRESO HOSPITALARIO O EN UN CENTRO DE ADICCIONES

 En casos donde haya habido un consumo prolongado de cannabis y exita el policonsumo con otro tipo de drogas y/o comorbilidad con trastornos mentales ya preexistentes. Pueden haber trastornos psicóticos provocados por el consumo, ideas autolesivas o de suicidio. En este tipo de casos, será  totalmente recomendable el ingreso.

A nivel de sanidad pública, nos podemos encontrar que sea difícil encontrar un hospital en el que  se trate de fondo el tema de la adicción. Más bien, con los recursos limitados que puedan tener, puede ser que se centren en frenar la sintomatología y se va a intentar inhibir, sobre todo en las primeras semanas, que es más fuerte.

Sin duda, lo ideal es encontrar un centro especializado en adicciones. Estos centros acostumbran a ser privados, ya que la sanidad pública en nuestro país no los costea. En ellos ayudan al consumidor a desintoxicarse, ser consciente de que es adicto y por tanto a que la persona entienda que va a ser su talón de aquiles, desgraciadamente, durante el resto de su vida. En  las terapias tambien les enseñan a encontrar sus propias herramientas y recursos, para hacer frente al consumo (reconociendo sus puntos débiles) y a ser conscientes del daño que les ha provocado y cómo revertirlo, para poder volver a integrar de nuevo, en la sociedad.

CONCLUSIÓN

Independientemente del tipo de tratamiento que se elija, no solamente afectará a la persona que consume, sino al entorno familiar e inclusive a la escuela, universidad o trabajo en el que se encontraba.

¿CUÁLES SON LOS OBJETIVOS PRINCIPALES?

En primer lugar se intentará paliar la simptomatología propia del cannabis y si hay sintomas asociados provocados por el cosumo del cannabis.

Podemos establecer que la desintoxicación será el primer paso. Para tratar la simtomatología, si además ha desarrollodo otras patologías asociadas también deberán ser tratadas, como hemos mencionado anteriormente. Para ello el papel del psiquiatra será fundamental, para que posteriormente el psicólogo pueda trabajar con el a nivel cognoscitivo.

Siempre se buscará en primer lugar después de paliar los sintomas y la dependencia, mantener la abstinencia, para poder más  adelante evitar, mediante factores de proteccion,  la recaída, por muy complicado que resulte.

Un tratamiento eficaz debe tener  varios ejes de trabajo:

1. Tratamiento Cognitivo- Conductual:

Trabajo psicoterapéutico basado en poder trabajar los pensamientos y las conductas, que son factores de riesgos para el consumidor.

Principalmente se trabajará en disminuir los pensamientos críticos y dañinos, substituyéndolos por otras cogniciones más adaptativas que proporcionen a la persona recursos y herramientas para poder luchar contra la impulsividad cuando tengan ganas de consumir.

     2.Tratamiento des del modelo bio-psico-social

Desde la línea biológica, los recursos innatos que las personas poseemos, adquiridos des del nacimiento, nos acompañan desde los inicios. Tanto los factores de riesgo, como los de protección.  Por tanto, deberemos estar alerta y tenerlos presentes como elementos peligrosos, aquellos que lo sean  y al mismo tiempo,  ser conscientes de su importancia y por tanto encontrar la manera más efectiva para evitarlos.   

Ante los factores de protección, hay que recordar, que son recursos, que nos ofrecen herramientas, para evitar decisiones perjudiciales para nuestra salud.

Siguiendo esta perspectiva, el modelo social  nos ayuda a potenciar la base social que tenga cada persona y que le permite enriquecer las interacciones sociales saludables y desechar aquellas que son tóxicas y con las que consumía.

LA IMPORTANCIA DE UN EQUIPO MULTIDISCIPLINAR

Los tratamientos ante cualquier tipo de desintoxicación por consumo de adicción siempre debería estar formado por un equipo multidisciplinar. Es decir, un red de profesionales de diferentes ámbitos de la salud como: médicos/ psiquiatras, psicólogos, enfermeros, educadores, trabajadores sociales que actuen como una sola unidad. El objetivo es obtener un tratamiento rico, exhaustivo que actúe no solamente de manera individual en la persona, sino haciéndose expansivo a los ámbitos que están a su alrededor, en los que interactúa, para convertirlos en factores de protección.

¿CÓMO PUEDE AYUDAR LA FAMILIA?

“El lugar donde nacen los niños y mueren los hombres, donde la libertad y el amor florecen, no es una oficina, un comercio ni una fábrica. Ahí veo yo la importancia de la familia.”

                                                             Gilbert K. Chesterton

Los adolescentes son la principal población de riesgo. Según  fuentes contrastadas del Plan Nacional de Drogas, un total de 61.085 menores de entre 15 y 17 años empezaron a consumir cannabis en 2013 en España.

En la adolescencia, el papel de la familia es fundamental y más sabiendo que la posibilidad del consumo de droga es elevado. Es importante que en esta etapa, los padres esten lo más informados posible. Se pueden dar charlas por ejemplo en las escuelas impartidas por especialistas, que nos permitan tener la información necesaria de lo que puede ocurrir de manera más concreta en estas edades, qué recursos pueden ser necesarios para afrontar ya no solamente el consumo por parte de los hijos, sino para actuar como factores preventivos.

Si la familia detecta que su hijo/a puede estar consumiendo, en ese momento de crisis, está claro que deberá ser un punto de apoyo, pero al mismo tiempo de control para que lo deje y la persona no entre en el oscuro túnel de la droga. A veces  se puede convertir en una lucha muy intensa, sobretodo cuando la persona no lo quiere dejar. Por parte de los padres, el mensaje ha de ser muy claro y si se ve en peligro su salud, no dudar en ingresarlo. La droga es un tema muy serio que no entiende de edades, ni de treguas y hay que estar preparados ya que cada día, desgraciadamente hay más familias destruidas porque un día su hijo probó un porro.

“Cuando se abre la puerta de la comunicación, todo es posible, de manera que debemos practicar  abrirnos a los demás para restablecer la comunicación con ellos”.

Anónimo

Será muy necesario trabajar las habilidades comunicativas en la familia, creando una red sólida, fuerte y sana para fomentar una comunicación positiva:

• Creando en la familia un espacio en que el consumidor se sienta seguro y sin miedo de expresar como se siente y que le ha llevado al consumo. Si lo conseguimos la persona dejará poco a poco a un lado la “coraza de mentiras” que llevaba, pudiendo dar paso a que emergan sus sentimientos.
• Mantener siempre una escucha activa: La escucha activa se mantiene mediante el esfuerzo físico (atención, posturas y signos faciales de escucha) y el esfuerzo mental basado en poder captar la totalidad del mensaje de lo que nuestro hijo intenta transmitirnos. Es importante que cuando escuchemos hagamos un proceso de feedback (devolución de la información) refuerzo positivo del mensaje escuchado.
• Mantener unas normas comunicativas: Es importante mantener unas pautas de comunicación. Dejar hablar al otro cuando sea su turno, aprender a escuchar, mostrar interés por lo que se está oyendo, establecer empatía (ponerse en el lugar del otro), actitud de paciencia.

Una buena comunicación contribuirá a afrontar y resolver mejor el problema de la adicción. Las personas que rodean a la persona adicta, se transforman en redes sociales que sirven de apoyo durante el proceso de recuperación.

Al comunicarnos adecuadamente, seremos capaces de contactar con los miedos, preocupaciones, tentaciones, etc, de la otra persona y por tanto, anticiparnos, al acto.

La familia puede ser una fuente de recursos interminable si se le dedica el tiempo necesario a construirla, de ella saldrán recursos adaptativos y equilibrados. Necesarios, para ayudar a la persona afligida, a canalizar, todo lo que haya en su interior.

A menudo, cometemos el error de creer que las relaciones entre las personas se forman solas y sin ningún tipo de esfuerzo, por lo que no dedicamos tiempo a cuidar de ellas. No entendemos el rol familiar como una de las principales fuentes de proteccón de nuestros hijos. A veces, desgraciadamente, la familia, es aparcada em um rincón y la droga (por mucha comunicación que halla), gana la batalla.

Una vez más, reitero la importancia, de que los padres e inclusive la escuela y el instituto, deben actuar como agentes de información, donde los jóvenes puedan entender cuan dañinas son las drogas y los efectos tan perjudiciales que pueden llegar a provocar.

La familia debe ser el trampolín, donde los hijos, encuentren una identidad y un estilo de vida basados en valores sanos, de los cuales quieran formar parte.

“La felicidad no se encuentra en el fondo de una botella o en la punta de una aguja; no se encuentra en medio de una nube de humo o dentro de una píldora recubierta de azúcar. Si la busca en esos lugares, no encontrará más que desesperación”

Wayne Gerard Trotman