La FIV con Acupuntura. ¿ La mejor ecuación para el embarazo?

“Los sentimientos de valor sólo pueden florecer en un ambiente donde se aprecien las diferencias individuales, se toleren los errores, donde la comunicación sea abierta y las reglas sean flexibles, el tipo de ambiente que se encuentra en una familia cariñosa.”                                    

Para Paula ha llegado el gran día. Mira el calendario, lleno de anotaciones de los medicamentos que se tiene que tomar, las hormonas que se tiene que pinchar y, evidentemente, de cada visita médica. Una vez más, con gran meticulosidad, vuelve a ojear el calendario de la nevera. Respira profundo, y piensa, hoy sí que es verdad, y aunque todavía no sé lo puede creer sus pulmones expiran en voz alta:

– ¡Marco que llegaremos tarde! Y yo tengo que estar lo más relajada posible.

– Ya voy Paula, dame un minuto que cojo las llaves del coche.

Y es que para la pareja hoy ha llegado un gran día. Después de mucha espera y de mucha lucha. Cogen el coche camino a la clínica de fertilidad. Paula hoy se va a implantar a través de un proceso de Fecundación In Vitro (FIV) un blastocito de 5 días en su útero.

Marco y Paula llegan a la Clínica. Paula está con los nervios a flor de piel. Les hacen pasar a los dos enseguida a un cambiador, para ponerse pijamas de quirófano esterilizados. En ese justo instante entra el doctor que les ha estado llevando desde el inicio del tratamiento:

– Que tal chicos, cómo van esos nervios? Hoy es un gran día eh?! ¿Habéis decidido cuantos blastocitos vais a poner?

– La verdad es que yo quiero poner dos. – Expresa Paula.

-Yo creo que es mejor uno. -Comenta Marco- ¿Usted que piensa doctor?

– Yo chicos, aunque la ley en España permite hasta 3, considero que poner uno es lo mejor, ya que es lo más saludable para el embrión y para la madre. Siempre estáis a tiempo de poner otro si no saliera bien.

Marco y Paula deciden hacer caso al doctor, los tres juntos pasan a una sala oscura en la que hay una pantalla que parece de cine. El corazón de Paula va a cien y se cogen de la mano con Marco, como si juntos se sintieran invencibles. Allí, se encuentra el doctor. De repente se abre una puerta con la genetista con una pipeta, donde está el blastocito (que justamente acaban de descongelar). Los dos se miran y saben que están pensando lo mismo, este hecho parece superar la ficción. Les hacen confirmar sus nombres varias veces para evitar equivocaciones. De repente, con la ayuda de una cánula, introducen el blastocito en el útero de Paula. Luca y Paula están con los ojos como platos, viéndolo sin perderse ni un detalle a través de la pantalla. Paula llora de la emoción. Tiene un pálpito de que por primera vez en su vida y tras muchas lágrimas, su sueño se ha hecho realidad y va a poder ser madre, de hecho, siente al salir de la clínica, que ya lo es. Cuando sale de la clínica, el sol ilumina su rostro, se siente especial, se siente que todo está cambiando, nadie podrá evitar hoy la preciosa sonrisa que se dibuja en su rostro, mientras piensa que hoy puede haber una vida nueva en su interior…la vida ya la ha maltratado bastante.

En las semanas próximas, Paula hace todo lo que el médico de la clínica le había recomendado: paseos relajantes, beber mucha agua, no estresarse mucho (aunque ella era periodista del corazón) y ponerse los óvulos de progesterona cada día sin falta. A pesar de eso, pasados diez días, un miércoles que Paula se encuentra en la redacción empieza a notar un leve mareo, cuando va al baño, se da cuenta de que está empezando a manchar sangre. Paula enseguida notó, como un sudor frío empezaba a desencajar su cara, se excusó en el trabajo de que no se encontraba bien, cogió un taxi mientras llamaba a Marco, y los dos se encontraron en la clínica. El doctor intentó tranquilizarla, expresándole que estas cosas a veces ocurrían, pero Paula sabía que no se había producido el embarazo, que esta vez la dura y triste realidad, una vez más, le daba un golpe a su gran sueño. Ser madre.

En la clínica, la examinaron y le hicieron una analítica de sangre. La cuál, evidentemente, confirmó sus sospechas, esta vez no iban a ser padres.

Marco y Paula salieron de la Clínica como anestesiados, sin fuerzas y sin mediar palabra. De alguna extraña manera, era como si hubieran metido sus emociones en una caja. Mantuvieron el silencio durante horas, supongo que ninguno de los dos tenía palabras que pudieran dar consuelo al otro, también si hablaban de ello, si hacía más real y por lo tanto más doloroso. Simplemente sentían que habían luchado esa primera batalla con todas sus fuerzas y recursos, y habían salido de ella, totalmente exhaustos.

Pasaron unos días, Marco se recompuso más rápido que Paula. Paula, quizás, era más emocional, y realmente, lo vivió más como un “aborto” o pérdida., donde para ella había todo un duelo que procesar. Tenía pensamientos negativistas, sentía que nunca iba a ser madre, que quizás el destino quería que fuera así, tenía la sensación de que la casa estaba vacía cada vez que entraba por la puerta y la verdad es que no quería volver a pasar otra vez por la experiencia tan traumática de la Fecundación In Vitro. Tenía inclusive un sentimiento de culpa, pensando que quizás era ella, la responsable, de que no pudieran tener hijos. A pesar de que la clínica de fertilidad, después de las pruebas realizadas inicialmente, había concluido que no había ningún motivo aparente, por el cual no pudieran ser padres.

Siguieron pasando unos días y Paula, que una vez recuperada del golpe, resurgía como el ave Fénix, decidió empezar a investigar si había alguna manera que pudiera ayudar durante el proceso de la Fecundación In Vitro para que ésta, fuera más eficaz. Había visto por internet, que en muchos sitios se anunciaba la acupuntura como medicina alternativa para mejorar las probabilidades de embarazo. Ella se quedó como muy sorprendida, así que decidió investigar sobre el tema.

Para entender un poco de manera un poco esquemática y resumida, podríamos decir que la Acupuntura proviene de la medicina tradicional china desde muchos siglos atrás. Consiste principalmente, en la inserción de agujas muy finas, en diferentes puntos estratégicos de nuestro cuerpo. Puede tener diferentes finalidades, por ejemplo: aliviar el dolor, mejorar el estrés, disminuir el apetito, mejorar la circulación, sanguínea, etc.

La medicina tradicional china habla de la acupuntura, como una metodología que tiene la finalidad de equilibrar el flujo de energía o fuerza vital, conocida como “chi” o “qi” creyendo que fluye a través de los canales (meridianos) que hay en el cuerpo. El eje central de la acupuntura, reside en que, si insertamos agujas en estos ejes meridianos, en los puntos concretos donde hay desequilibrios energéticos, la energía que tenemos se volverá a equilibrar y por tanto nuestro sistema a funcionar.

Paula, cuando estuvo leyendo sobre la acupuntura, no sabía cuál era la relación entre el concepto de la medicina tradicional china y las mejorías en los embarazos por FIV.  Pero decidió seguir investigando y se sorprendió con los estudios que encontró.

¿QUÉ ENCONTRÓ PAULA RESPECTO A LA RELACIÓN ENTRE ACUPUNTURA Y FECUNDACIÓN IN VITRO?

Paula encontró diferentes estudios que hablaban de conclusiones que apuntaban a una relación directa entre la acupuntura y el aumento de porcentajes en embarazos realizados por FIV. El porcentaje de aumento era aproximadamente en la mayoría de estudios entre el 33 y el 45% siendo, por tanto, los resultados, estadísticamente significativos.

ESTUDIOS REALIZADOS

Un ejemplo de ello, lo encontramos en el estudio publicado en el año 2002 por la revista Fertility and Sterility.

El estudio pionero se realizó en una clínica de fertilidad en Alemania. Hubo una muestra de 160 mujeres que se ofrecieron para realizar una fecundación in vitro. Los blastocitos tenían buena calidad embrionaria.  La mitad de la muestra del estudio, recibieron técnicas de acupuntura, 25 minutos antes y después de la transferencia de embriones, el resto no recibió ninguna terapia de apoyo. Los resultados del estudio, fueron realmente espectaculares y significativos a nivel estadístico. Se concluyó que el 42% de las mujeres que recibieron acupuntura quedaron embarazadas en comparación con un 26% que había realizado el tratamiento de fecundación in vitro sin acupuntura.

La Universidad de Medicina de Maryland en Estados Unidos, (California) también realizó sus propios estudios de investigación. Ellos, a posteriori de los estudios realizados en Alemania y Londres, realizaron unas investigaciones similares sobre los efectos existentes entre la relación que tenía la acupuntura entre las mujeres que decidían pasar por una fecundación in vitro. En total se realizaron 7 ensayos, en los que se incluyeron un total de más de 1300 muestras de sujetos en cada una. Una vez más, los investigadores se sorprendieron de la variable positiva que resultaba entre la técnica de la acupuntura y la fecundación in vitro. Concretamente, los investigadores, encontraron que cuando la acupuntura se llevaba a cabo en el día de la transferencia de los embriones, las estadísticas mejoraron significativamente en las tasas de embarazos clínicos.

¿QUÉ CURVA ESTADÍSTICA PODEMOS ESTABLECER DE LOS ESTUDIOS?

A modo resumen, podemos concluir que se están realizando estudios a nivel mundial en los cuales se está demostrando, que hay una evidencia notable, entre la acupuntura y la fecundación in vitro.

Esta relación positiva entre ambas. Es una clara y muy optimista ventaja a todos los niveles (emocional, psicológico y económico) en la Fecundación in Vitro y abre, ante los investigadores y futuras mamás un mundo más amplio de posibilidades para llegar a ser madres y con menor sufrimiento.

No se puede negar que hay una la relación clara y positiva entre la medicina tradicional china de la acupuntura y la FIV, aunque todavía es muy novedosa y hay que continuar haciendo muchos estudios, para seguir aumentando los porcentajes positivos de embarazo.  De lo que sí estoy segura, es que si se sigue por el camino trazado hasta el momento, con estudios rigurosos,  muestras más amplias, diferenciales y aleatorias dentro del grupo,  se irán aumentando los métodos para que las mujeres que desean ser madres puedan llegar a cabo su objetivo, sin tener que pasar por tanto sufrimiento: perdiendo embriones (en las que muchas veces hay un proceso de duelo en silencio), gastando cantidades de dinero desorbitadas en las clínicas de fertilidad cada vez que se introduce un blastocito o cuando la pareja ha de repetir un proceso de fecundación in vitro porque se han quedado sin blastocitos, etc.

Mientras algunas de las clínicas como hemos mencionado anteriormente, seguirán enriqueciéndose por cada proceso FIV que repiten por diferentes motivos como por cada blastocito que introducen en la matriz, sin dar alternativas a técnicas como la acupuntura, que aumenta, claramente los resultados positivos de que la FIV salga un embarazo. En Barcelona, por ejemplo, solamente hay dos clínicas que disponen de este servicio in situ y en ningún momento, ninguna de ellas de ellas te lo comenta que disponen de este servicio, ni tan solo del psicológico (también más que necesario en muchos de los momentos del proceso), solo es observable en la página web, donde señalan ambas clínicas, todos los servicios de los cuáles disponen.

¿QUÉ APORTA LA MEDICINA TRADICIONAL CHINA A LA FIV?

La medicina tradicional china, concretamente la acupuntura intenta explicar en términos fisiológicos, que la estimulación que proporcionan las agujas, aplican una serie de sensaciones que estimulan la liberación de diferentes substancias del SNC (Sistema Nervioso Central) como pueden ser los Opioides (encefalinas, endorfinas, dinorfinas) o  la Seratonina,  mediando ambos en el sistema nervioso simpático (parte del sistema nerviosos que aumenta la frecuencia cardíaca, la presión arterial, la frecuencia respiratoria y el tamaño de las pupilas. También hace que los vasos sanguíneos se estrechen y reduce los jugos digestivos).

Es sabido que la endorfina B, provoca la liberación de gonadotropinas adicionales (la hormona estimulante del folículo y la hormona luteinizante) que, a su vez, mejoran la estimulación de los ovarios y aumentan la producción de estrógeno necesarias para que el útero esté en las mejores condiciones posibles y con el grosor adecuado (ni más ni menos, para acoger al blastocito).

También se ha demostrado que la reducción de la estimulación del sistema nervioso simpático puede derivar en un aumento del flujo sanguíneo al útero, aumentando muchísimo las posibilidades de que el blastocito se adhiera al útero.

¿CUÁNDO DEBE ADMINISTRARSE LA ACUPUNTURA?

Para que tenga éxito en la paciente que está pasando por un tratamiento de Fecundación In Vitro es bueno, diferenciar, las diferentes fases que deben darse en el proceso de la acupuntura: 

  • Fase de preparación: El principal objetivo será mejorar el funcionamiento de los ovarios, reforzar el sistema inmunológico y reducir el estrés. También será prioritario ir aumentando el flujo sanguíneo en el útero, con el propósito de   impulsar la implantación de embriones.
  •  Administrar la acupuntura dos horas antes de la FIV: Antes de la introducción del blastocito la acupuntura, sigue ayudando en el proceso circulatorio de la sangre, al mismo tiempo que aporta un efecto calmante en el proceso estresante para el cuerpo y la psique de la FIV. Simultáneamente, se seguirá preparando al útero para la llegada del embrión.
  • Después del proceso de la FIV (dos horas siguientes a la introducción del blastocito): Sigue siendo importante realizar el proceso de la acupuntura, en las dos horas siguientes a la transferencia de embriones, la acupuntura preparará y mejorará el útero para la implantación, siendo decisiva en las primeras horas.

¿QUÉ HIZO PAULA CON TODA LA INFORMACIÓN ENCONTRADA?

Después de todo lo que encontró Paula, esa noche esperó a Marco que llegaba muy tarde de trabajar. Le explicó contrariada, toda la información que había encontrado, por un lado, se sentía eufórica. Quizás, la acupuntura, pudiera funcionar con ella. Por el otro, temerosa, de que no lo hiciera y tuviera que decir adiós definitivamente no a sus posibilidades de ser madre, pero sí a la de sentir la posibilidad de que tu hijo crezca dentro de ti. Ella y Marco tendrían que hacerse a otras ideas de cómo ser padres.  Al mismo tiempo, todos sus ahorros, los habían destinado a ello y ahora no podían plantearse ni psicológicamente ni psicológicamente otra FIV ni tampoco un proceso de adopción. La verdad, es que Paula, se sentía un poco defraudada, no entendía que tanto en adopciones, como en clínicas de fertilidad todo se moviera alrededor del dinero, con toda la gente que desean ser padres… es ¿acaso que se juega con ellos? o ¿son realmente las gestiones y las técnicas usadas, tan costosas? ¿por qué no les habían dicho en ningún momento que existían estos estudios? Los resultados, parecían, exitosos, ¿no?

Cuando Marco escuchó todo lo que Paula le iba contando tampoco daba crédito, mañana mismo llamarían a la clínica. Los dos tenían un objetivo muy claro, luchar hasta el final, agotando todo tipo de posibilidades, para poder salir de la clínica: embazados.

A primera hora de la mañana, ambos después de tomar una buena taza de café humeante, lo primero que hicieron fue llamar a su doctor. Le comentaron que querían realizar la introducción del segundo blastocito, pero esta vez a partir de la combinación de la técnica de la acupuntura, que sabían que había en su clínica. Se oyó al doctor titubear, al otro lado del teléfono y les dijo:

– Chicos. ¿Sabéis que estas técnicas de acupuntura, tampoco son baratas verdad? Y al mismo tiempo, tampoco hay un índice de fiabilidad altamente significativo porque todavía quedan muchos estudios por realizar. Tampoco sé si hay horas disponibles para las fechas que realizáis hacer la transferencia.

-Lo sabemos, pero Paula ha estado mirando los estudios y los porcentajes y creemos que este puede ser nuestro problema-comenta Marco. – Hasta el momento no habéis podido localizar cual es la causa de nuestra infertilidad y creemos que, aunque Paula las analíticas de sangre de Paula, no reflejan ningún problema, quizás nuestro talón de Aquiles, reside en que no le llegue bastante sangre a la matriz y por eso el embrión no se está puede arraigar. Sino tenéis cita, no vamos a desperdiciar otro blastocito, ni a desgastarnos más psicológicamente ni tampoco a invertir más dinero, nos lo llevaremos a una clínica que sí disponga de las necesidades que nosotros pensamos que son necesarias, después de habernos tomado gran parte de estos meses en informarnos y pueda considerar este tema de manera tan importante, como lo consideramos nosotros.

– Muy bien Marco y Paula seguiremos este plan con tratamiento de acupuntura previo, casi in situ e inmediatamente después de la FIV, espero chicos que nos dé un buen resultado.

Pasó un mes después de las sesiones de acupuntura previas, Marco y Paula llegaron a la clínica de Fertilidad dos horas antes, para realizar la sesión previa a la introducción del que era ya el segundo embrión. En su interior, Paula no paraba de pensar que no estaba preparada para perder otro embrión. Para ella el primero, aunque nadie lo había entendido, había sido un proceso de duelo. Esta vez, quería tomar más distancia emocional, aunque la verdad conociéndose, no sabía si iba a poder. Luca, en cambio, era puro optimismo, pensaba que todo iba a salir bien.

Pasaron los días, tanto Luca como Paula intentaban no hablar del tema. Paula consiguió mantener una distancia emocional “estratégica” casi de negación, diciéndose a sí misma constantemente que estaba segura de que no. No estaba embarazada. De hecho, se lo decía tanto, que no llegó a cuidarse tanto como la otra vez, estaban en época máximo de trabajo en la redacción y ella trabajaba cuánto más mejor, si se saltaba una comida, ni se daba cuenta, si tenía que salir corriendo para conseguir una noticia y quedarse sin aliento. ¡No pasaba nada! El día doce, le dijo a Luca que comprara ya las dos pruebas de embarazo, ya que la clínica de fertilidad, siempre hacía hacer dos y a posteriori a los 16 días, una de sangre. Le dijo a Lucas (que aún mantenía las esperanzas), las hacemos ya y nos olvidamos del tema. Y así, con una frialdad totalmente anormal en Paula, se hizo el primer cogió el primer test. Entonces, por primera vez en toda su vida, vio que el banco nuclear dejaba de existir. Dos rayitas muy tenues y para ella, las más preciosas que había visto nunca, fueron haciéndose cada vez más visibles. Pensó, que nunca, a lo largo de su vida, llegaría a verlas. Salió del baño, no podía hablar, se sentó en el suelo, llorando sin parar.  Luca acudió corriendo a consolarla, pensando que había salido otra vez negativo y que todo el esfuerzo de la acupuntura, no había servido para nada. Cuando se acercó hacia ella, parecía una niña indefensa llorando en el suelo y secándose los mocos con la manga del jersey (algo raro que siempre hacía cuando lloraba, pero que Marco adoraba), pero entonces, se percató que Paula extendía el brazo y se lo daba y Marco, al igual que ella, vio el milagro, las dos rayitas. Se sentó con ella y le susurró al oído:

-Felicidades mamá!

REFLEXIÓN FINAL

Después de una larga lucha, al igual que para muchas parejas, y de un fuerte desgaste, sobretodo psicológico (de lo que hablaremos en otro artículo), lo imposible, se hizo posible. Para Luca y Paula, el final de esta historia terminó bien, pero hay que decir, que para muchas parejas el final es lleno de lágrimas, dolor y deseos nunca completados, que pueden llevar a otros tipos de conflictos en la pareja como son: créditos, conflictos en la pareja (inclusive divorcios), reproches, etc.

Ser madre cada más se retrasa más en nuestra sociedad, la media está entre los 35-40 años sobretodo siendo madre trabajadora fuera de casa.  Cuándo te has labrado un poco las primeras huellas de la andadura profesional, el reloj biológico ya hace años que su alarma está sonando, pero las reservas ováricas a partir de los 35 ya empiezan a realizar las primeras bajadas en el cuerpo de la mujer y a los 40 está ya, declina de manera significativa.

Por otro lado, compaginar trabajo e hijos, no es nada fácil, con un sólo hijo el coste de la vida ya es alto sino puedes recurrir a nadie que te ayude a realizar malabares laborables, toda esta pelota cada vez se va haciendo mayor y cuando te das cuenta… ¿Quién tiene la solución?

Te empiezas a encontrar con muchas parejas con dificultades para quedarse embarazadas y aquí es donde aparecen las Clínicas de Fertilidad, solamente en Barcelona si buscas por Google aparecen 2.140.000 clínicas de fertilidad con precios similares a la entrada de un piso, aquí tenemos el gran negocio y para muchos, la gran solución, tanto para parejas, como para madres solteras.

Otra posibilidad sería la adopción, con sus listas interminables de requisitos que debes de tener para poder optar a ella (se hablará en otro artículo).

En resumen, se puede afirmar que actualmente, ser padres y compaginarlo con tu carrera profesional es todo un puzle. También tienes que tener presente tu estatus económico, el cual tiene que estar más que consolidado o “hipotecar” a tus padres siempre que éstos no estén todavía trabajando para que cuiden de tu futuro hijo. Parece que los valores que había antes sobre la familia se han invertido. Antes la familia estaba en primer lugar dejando ese espacio al trabajo. ¿De eso trata el capitalismo, ¿no? Confío que no.

Confío en que podamos tener hijos íntegros y con valores sanos a tiempo, desconozco el tiempo que pasaremos con ellos, si podrá ser menos o más, pero independientemente de cual sea, por favor, que sea de calidad, eso es lo más importante (también hablaremos de esto en otro post).

Mi consejo es que intentéis perseguir vuestros sueños familiares con la persona a la que amáis o sino puede ser, aunque como psicóloga, tengo que expresar que no es lo “ideal” solos y con ella o con uno mismo, tengáis la sabiduría para dejaros aconsejar por especialistas sabios, que os puedan ayudar a llegar a la meta, de manera equilibrada psicológicamente, como pareja, como individuo y económicamente. Y, sobre todo, nunca perdáis la perspectiva y siempre mantened la esperanza de que hay muchas maneras de poder ser padres, muchos niños con demasiadas carencias y aunque los caminos nunca son fáciles y es relativamente sencillo perder la primera batalla solo es el inicio de una guerra más en tu vida. Y en esta vida, hay muchas guerras que se han ganado, todo y haber perdido la primera batalla.

Mientras las cosas son realmente esperanzadoras, la esperanza es un nuevo halago vulgar: sólo cuando todo es desesperado la esperanza empieza a ser completamente una fuerza.”

Gilbert Keith Chesterton